Juan María, de apenas un año y seis meses de edad, falleció ayer luego de estar internado desde el sábado, cuando fue mordido en la cabeza por el propio perro de la familia.
El animal, de raza mediana y mezcla de ovejero aleman, se prendió a la cabeza de la criatura, provocándole fractura de cráneo y daño cerebral.
Estuvo con muerte cerebral durante 4 días, hasta que ayer la familia decidió la desconexión a los aparatos que lo mantenían respirando.
NO PUDO SER DONANTE
Pese al dolor de la situación, los padres del menor (con gran consciencia social), domiciliados en calle El Toledano, decidieron la donación de sus órganos. Acto seguido el INCAIMEN comenzó a trabajar en el tema, pero LAMENTABLEMENTE no pudo hacerse la ablación de ningún órgano, debido a que no se registró compatibilidad con los posibles receptores.