Una adolescente de 17 años fue sorprendida mientras conducía un Fiat Regatta, sin la correspondiente licencia de manejo.
El control policial la detuvo en Sobremonte y Santa Fe, y los efectivos no solo se sorprendieron por encontrar a la menor al mando del volante, sino por haberle dado positivo el control de alcoholemia.
Presa de la ira porque le estaban labrando la multa, y en medio de una discusión con los acompañantes de la joven (de 18 y 59 años), la adolescente tomó del interior del vehículo una botella de vidrio y se la lanzó a uno de los uniformados, que resultó herido por el golpe.
El incidente terminó con la infractora en la Comisaría del Menor, procesada por “resistencia a la autoridad y lesiones”, mientras que el policía en la Policlínica.