La intención en algunos sectores del radicalismo local por presentar una lista única para las próximas PASO ha generado molestias en el sector que lidera Lucas Quesada.
Es que el actual concejal y precandidato a Intendente no quiere que le impongan nombres en su lista y prefiere medirse contra el resto de sus adversarios políticos.
Convencido que el camino a seguir es la unidad en la provincia, detrás de la fórmula Cornejo-Montero, Quesada insiste en que cada precandidato a intendente se presente con su lista para someterse al voto popular y no al acuerdo de cupulas con candidatos que no tienen consenso social
En este escenario, el mensaje es claro “vayamos a las PASO para que la gente elija a sus candidatos”. Esta idea parece no tener cabida en algunos sectores que buscan espacios por los que no militaron y ahora convencidos de que hay una alternativa interesante para competir con el oficialismo “buscan negociar cargos”.
Hace más de una década que el radicalismo no tiene un candidato que crezca día a día en las encuestas como una alternativa seria de poder. “Las mezquindades de algunos que hace tiempo que no militan aparecen cuando la oportunidad está a la alcance de la mano, se oyó decir en una de las últimas reuniones”.
En este marco parece que muchos se quieren subir al carro ganador sin tener en cuenta quienes colaboraron y trabajaron durante la gestión de Quesada en el Concejo Deliberante.
Es así que a la espera de la conformación de las listas para las PASO, los chisporroteos ya han generado preocupación en un partido que debe ofrecer candidatos que la gente pueda elegir y no sean designados a dedos detrás de un escritorio, sostienen desde el sector de Quesada.