Un motociclista dejó estacionada su Honda 110 cc en la vereda de calle Suipacha esquina Segovia, para ingresar un minuto a la vivienda.
No apagó el motor, y apoyó el casco en el asiento.
Al salir de la propiedad observó que un joven de 20 años se estaba poniendo el casco, para luego acelerar con el vehículo.
Desesperada, la víctima llamó a la policía.
Minutos después un móvil interceptó al ladrón en Quintana y Marcelo T de Alvear, donde también secuestraron la moto.