Ayer a la mañana los concejales de la Unión Cívica Radical estaban dando una conferencia de prensa en el recinto de sesiones cuando hizo su aparición un hombre de condición humilde, pasado de alcohol y con una suerte de espejo de 30 centímetros de largo entre sus manos.
El edil Mauro Bignert se le acercó para preguntarle que necesitaba, y recibió como respuesta que si no le daban un nylon se iba a cortar todo ahí mismo.
Es por eso que Bignert fue a buscar al presidente del Cuerpo, Cdor. Ricardo Vergara, quien lo calmó, y tras escuchar su reclamo lo llevó al área de Gobierno, para que le procuren una solución.
Por lo que pudo averiguar HOY SAN RAFAEL, el hombre vive en la calle, más precisamente en la ex estación del FFCC, pero como se peleó con el otro grupo de «cirujas» que habitan el lugar, pidió que le den un nylon para construir una nueva «guarida».
Vale decir que el aliento a alcohol del hombre era tal que quedó impregnado en el lugar.