Finalmente ayer miércoles, Enrique Alfredo Videla (22) dejó de existir en la sala de terapia intensiva del Htal. Schestakow.
Recordemos que Videla, quien se encontraba en situación de calle, fue baleado en la cabeza el jueves pasado en horas del mediodía, cuando caminaba por Av. Mitre al 1800.
Aún la policía busca al autor del crimen, un motociclista que le tiró a quemarropa, lo que hace pensar que se trató de un ajuste de cuentas, pues el occiso se dedicaba al malvivir.
SUS ORGANOS SEGUIRAN VIVIENDO EN OTRA PERSONA
Ante la muerte cerebral del joven, sus familiares decidieron autorizar la donación de sus órganos, por lo que personal médico del Incucai realizó la ablación correspondiente, aunque no se informó cuantos de ellos se lograron salvar.
La mejor decisión.