Mujeres de todo el país se manifestaron en las calles céntricas de sus respectivas ciudades para celebrar «el Día Internacional de la Mujer», que se conmemora todos los 8 de marzo.
La consigna principal este año fue contra la violencia de género, en virtud a los casos de femicidio que se registraron en los últimos tiempos. Pero entre las manifestantes también había feministas radicalizadas, quienes pidieron por el derecho al aborto legal y gratuito.
En ese marco, en varias localidad pintaron el frente de iglesias, y San Rafael no fue la excepción.
Aproximadamente unas 150 femeninas, y unos pocos hombres, se apostaron frente a la Catedral, y algunas de ellas, con los rostros tapados, pintaron el lateral del templo religioso, con frases relacionadas al derecho a decidir sobre el destino de sus embarazos, aunque con metáforas algo fuertes.
Aprovecharon también para hacer cánticos contra la institución, por su postura al respecto, y su influencia en las decisiones gubernamentales.
Luego las mujeres se dispersaron, dando así fin a la movilización.