Si bien los celulares están prohibidos dentro de las cárceles, implícitamente se les permite su uso y tenencia a los internos, con el fin que se entretengan manteniendo contacto con el exterior.
Muy de vez en cuando se hacen requisas en busca de teléfonos, pero en realidad son una pantalla, pues ya está incorporado en el diario vivir ese «permiso».
LAS CHICAS SOLO QUIEREN DIVERTIRSE
Para no aburrirse, un grupo de las mujeres que ocupan el pabellón femenino de la penitenciaría de San Rafael, se entretienen sacándose fotos con los celulares.
Pero eso no es todo, crearon una cuenta en Facebook para subir dichas imágenes.
Como el lector aprecia, las jóvenes presidiarias muestran sus curvas sobreactuadamente, y hasta se tocan.
En sus pieles abundan los tatuajes, y no les falta maquillaje.
A modo de presentación, en la cuenta de Facebook plasmaron un escrito, donde precisamente no abunda la buena ortografía, aunque sí la dialéctica presidiaria:
Párrafo aparte merecen los comentarios que hacen otros presidiarios, alojados a menos de 20 metros de donde ellas se encuentran, pero eso lo dejaremos para una nueva nota.
