En el pequeño patio de la cárcel local, fueron bautizadas esta tarde un total de 71 personas, todas presidiarias, de las cuales 57 son varones y 14 son mujeres.
Estos 71 flamantes bautizados en el evangelismo, se suman a los 77 que lo hicieron en febrero pasado.
El pastor Víctor Doroschuk encabezó la ceremonia, con la ayuda de su equipo de la iglesia Vida y Paz.
«No se bautizaron porque son perfectos; más bien dejaron entrar al Espíritu Santo para que El los transforme», manifestó Doroschuk.
Para hacer posible el ritual, se tuvo que instalar una pileta de lona y llenarla de agua, donde los privados de su libertad sumergieron sus cabezas.