El gobernador dejó inaugurada ayer la nueva Cárcel de San Rafael, que funcionará de manera totalmente independiente al penal de Av. Mitre y a la Colonia Penal que se encuentra a pocos metros.
La obra es una de las más importantes que se realizó en San Rafael en las últimas décadas, a punto tal que requirió un presupuesto de 73 millones de pesos.
Se trata de un mega edificio dividido en tres sectores: La Guardia, el SUM para visitas, y los dos módulos de calabozos en planta baja, mientras que en un primer piso se ubican las oficinas de las autoridades.
Son 26 celdas por pabellón, que albergarán a tres internos por cada una de ellas, por lo tanto la capacidad total será de 156. Dichas celdas tienen ventanas donde ingresa luz natural durante todo el día (a diferencia del penal de Av. Mitre), tres cuchetas de hierro tejido, una mesa, dos asientos y tres repisas, todos ellos prácticamente irrompibles y adosados al piso y la pared.
El SUM para visitas incluye también seis habitaciones privadas, para que se puedan requisar a los visitantes. El lugar posee aclimatadores y otras comodidades.
Los patios son inmensos, y permitirán a los presos poder hacer caminatas y otras actividades físicas, en tanto el conjunto de baños por pabellón cuenta con tres inodoros, dos duchas y dos piletas para higiene o lavado de ropa.
SÓLO PARA PROCESADOS SIN ANTECEDENTES
El próximo martes 28 comenzará la mudanza de los internos de la vieja cárcel a la nueva. En principio se seleccionaron 30 personas, y con el pasar de las semanas irán trasladando más presidiarios.
Vale decir que podrán ocupar la nueva cárcel sólo aquellas personas mayores de 21 años, que hayan sido detenidas por primera vez (es decir, sin antecedentes), y mientras no tengan condena. En definitiva alojará únicamente a procesados.
Los hombres acusados por violencia de género o causantes de homicidios en «accidentes» de tránsito, son algunos ejemplos.
La dirección de la cárcel estará a cargo del director de la cárcel, Roberto Mango.
480 PRESOS EN SAN RAFAEL
«En San Rafael tenemos 480 personas privadas de la libertad, de los 4.600 que tenemos en toda Mendoza. Hoy inauguramos 150 plazas nuevas para mejorar las condiciones de vida de quienes están presos. Esto ayuda a la resocialización, que es a lo que aspira al sistema para bajar los niveles de inseguridad, un edifico nuevo de esta envergadura es una inversión enorme para el estado provincial”, señaló el gobernador.
«Cuando asumí el gobierno había 3.700 presos, y hoy hay 4.600. Esas 900 personas de más se explican por la nueva política de seguridad y persecución penal. Estas 900 personas han cometido delitos con el uso de armas y antes este tipo de delitos quedaban en libertad esperando la elevación a juicio en sus casas, hoy toda persona que comete un delito con arma queda detenida hasta la elevación a juicio», prosiguió Alfredo Cornejo en su discurso.
En cuanto al mejoramiento del Poder Judicial, el mandatario afirmó:
“Hemos logrado que los procesos sean más ágiles; antes el 66% de los presos estaba en proceso sin condena esperando entre 3 o 4 años, hoy con 900 personas más privadas de la libertad se ha invertido la cifra y más del 60% esta condenado, eso es lo que generaba violencia. Una vez que la persona recibe la condena se concentra en tener beneficios para salir antes y recuperar la libertad, entonces trabaja o estudia”.