«Yo me tengo que guiar por información concreta y veraz. Más allá de enterarme el fin de semana pasado de la situación, en lo concreto, recién el martes me llegaron los primeros informes y firmé una resolución (180/20) mediante la cual ordenó una investigación en toda la cuenca del Atuel y en particular en las inspecciones de Cauce de La Junta, Coihueco y Sosneado, a cargo de la Jefatura de Río Malargüe”, comenzó afirmando el superintendente general de Irrigación, Sergio Marinelli, en referencia a la denuncia por presunto robo de agua que hicieron inspectores de Cauce sureños y que tomó estado público el miércoles.
Marinelli desplazó del cargo al ingeniero de Irrigación que estaba a cargo de las Inspecciones de Cauce de La Junta, Coihueco y Sosneado, y designó a otro profesional del organismo con un rol de interventor. A la vez, dispuso una urgente auditoría contable.
Los inspectores de Cauce no son empleados de Irrigación, son elegidos por los regantes cada cuatro años para representarlos dentro del sistema hídrico. En este caso, algunos de ellos, entre los que está Javier López (del canal Rama Norte Unificada), apuntaron a tomas de agua del río Atuel, antes de ingresar al embalse de El Nihuil, entre La Junta en Malargüe y el El Sosneado en San Rafael.
Por otro lado, la Justicia está actuando de oficio y el viernes citó a declarar a López en Malargüe.
“Nuestra investigación está a cargo de Ricardo Luqui, jefe de Distribución del Tunuyán Inferior. Es una persona que yo ya había jerarquizado porque es quien está implementando metodologías de riego mucho más eficientes. Lo ha hecho en su cuenca y lo estamos intentando hacer en el resto. El será una especie de interventor en la cuenca del Atuel. Además de la parte legal y todo lo que son las auditorias técnicas que se van a hacer en conjunto con el Tribunal Administrativo”, explicó Marinelli.
Y aclaró: “También es importante decir que las dos tomas de agua en cuestión no son clandestinas porque responden a superficies empadronadas, tienen derecho de riego puesteros y Gendarmería Nacional. Lo que tenemos que terminar de investigar es el uso del agua y la cantidad, si es por cuestiones topográficas, por costumbre o por qué la utilizan mal. Fui al lugar y hay un riego a manto realmente excesivo, lo cual es malo. Pero es peor si le estamos dando más agua de la que le corresponde. Es lo que vamos a determinar”.