Se trata de «Punto Extremo», cuyo tanque receptor de las aguas servidas del local colapsó, por lo cual desde hace varios días se están vertiendo sobre el espejo de agua.
Según pudimos averiguar, el comercio es propiedad de Ariel Martín, el mismo que hace un par de meses sacó más de 150 camionadas de tierra de un cerro, destruyendo la vegetación, y que construyó un hotel clandestino.
Ante la denuncia recibida por una familia de turistas (que viene a San Rafael todos los años), un periodista de #ALERTA fue ayer hasta el lugar y constató la veracidad de la misma.
Advertirmos a los organismos competentes que tomen medidas urgentes, ya que el lago está siendo contaminado.