A un año del crimen de Ivan Guajardo, marcha para pedir justicia y vuelta de tuerca en la causa

Ivan Guajardo
Mañana lunes 23, a las 10 de la mañana en la plaza de Cuadro Nacional, se realizará una marcha para pedir justicia por la muerte de Ivan «El Chino» Guajardo, el joven de 19 años que el mismo día del año pasado fue muerto de una puñalada en la puerta de su casa, de calle Gral. Paz 158.
Dicha marcha de silencio finalizará en la Comisaría del distrito; en tanto, el miércoles 25 familiares y amigos del chico fallecido pedirán justicia frente a los Tribunales locales.

EL HECHO
Iván asistió junto a su amigo Braian a una fiesta de 18 años en el Cuadro; al salir -a eso de las 5 de la mañana-pasaron por la plaza del distrito, donde fueron burlados y agredidos por un grupo de sujetos, que variaba entre mayores y menores de edad.
Al sentirse amenazados, salieron corriendo hasta la casa de Ivan, en calle Santa María de Oro, a apenas 150 metros de la plaza. Pero la patota corrió detrás de ellos, tirando a ambos al piso.
Mientras que a Braian le dieron una paliza, a Ivan le clavaron un punzón a la altura de la axila izquierda.
El hermano menor de la víctima escuchó los ruidos, por lo que abrió el portón y vio como como tres sujetos le pegaban en el piso a «el Chino», quien luego fue trasladado al Htal. Schestakow, donde murió dos horas después por la perforación de un pulmón.
En tanto, los agresores salieron corriendo y volvieron a la plaza.

CONFESÓ EL ASESINO… PERO NO SERÍA ERA EL ASESINO
48 horas después del crimen, Mauro Sebastian Velazquez (21), apodado “el Chicha”, y de profesión albañil, dijo que él había sido uno de los que corrieron y golpearon a Guajardo, y que tenía en su poder un pica hielo con el que apuñaló al joven.
 «Le di el puntazo sin creer que lo iba a matar», confesó «el Chicha» ante el juez Pablo Peñasco, por lo que éste ordenó su traslado a la cárcel de encausados.
También se presentaron ante la Fiscalía dos mayores y dos menores, quienes relataron que ellos participaron de la paliza a Ivan y Braian, para ponerse a disposición de la Justicia.

COMO EN «RELATOS SALVAJES»
El homicidio parecía esclarecido, por lo que el juez Peñasco ya estaba por enviar las actuaciones a la Cámara del Crimen.
Sin embargo, en noviembre pasado Velazquez pidió hablar con el magistrado, y terminó por confesarle que él no mató a Guajardo, y que el autor de la puñalada había sido Alexis Vega Pavez, otro de los que participó de la golpiza.
El albañil explicó que actuó por orden de los padres de Vega, quienes durante un tiempo le dieron alojamiento y comida, los días previos al crimen, ya que el muchacho no tenía donde vivir.
La declaración coincide con los dichos de otros testigos, quienes sabían que era Vega quien andaba con el pica hielo.
 «Nuestro hijo tiene antecedentes, por lo que no saldría más de la cárcel… mejor declará que fuiste vos que apuñalaste al pibe, que te ponemos un abogado y salís enseguida», le habrían dicho los padres de Vega a «el Chicha», a quien visitaron frecuentemente en Mitre al 2000 y le llevaban comida.

NUEVA DETENCION
Para Peñasco todo era confuso tras el quiebre de Velazquez, que se «comió» varios meses dentro del penal. Por tanto decidió sacarlo de la cárcel, pero dándole prisión domiciliaria.
Casualmente esta semana, luego que la mamá de Ivan saliera a pedir Justicia, Peñasco ordenó la detención y traslado de Vega a la cárcel, acusado como el principal sospechoso de la puñalada.
Tal como en la película «Relatos Salvajes», Velazquez confesó un crimen que no cometió para salvar al hijo de quienes lo ayudaron en sus malos momentos.

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