A las 9.20 de la mañana del jueves, unos 50 mil usuarios de la empresa Edemsa quedaron sin suministro en San Rafael. ¿El motivo? Se quemó un cable de unos 10 centímetros de espesor en la subestación de barrio San Rafael, que transporta 13.200 voltios.
El cable se recalentó y se prendió fuego, tanto el cobre como el aluminio que lo recubren. Acto seguido, el fuego se propagó a los otros 19 cables que lo rodeaban.
Hay que decir que dichos cables son nuevos; se colocaron en septiembre pasado, conjuntamente con la instalación de un nuevo transformador que costó millones de dólares.
Tras el «desastre», una decena de técnicos vinieron desde Valle de Uco y Mendoza, para ayudar en el cambio de los cables. Un total de 11 horas duró el apagón, ya que a las 20:15 se reconectó el servicio, a minutos del comienzo del partido Boca-River, que tenía en vilo al departamento.
FALLA
Todo indica que se produjo una fatiga del material, pero no debido a una sobrecarga, ya que a esa hora la demanda de energía era normal.
El cable fue enviado a periciar, para poder determinar la responsabilidad del fabricante. Dichos cables tienen garantía y seguro, aunque ese monto no llegará a cubrir las demandas por daño que desde el viernes le están llegando a la empresa, tanto de comerciantes que perdieron mercaderías, como de industrias y comercios que tuvieron que dejar de producir y vender. En este sentido, los reclamos por «lucro cesante» pueden ser millonarios.
RECLAMOS
Quienes hayan tenido pérdidas debido al corte del suministro eléctrico, deben apersonarse a EDEMSA y pedir un formulario «daños», que la empresa tendrá 10 días hábiles para responder. Y ante cualquier duda o pedido de asesoramiento, el usuario debe remitirse al EPRE, en calle Bombal 283.