Poco antes del atardecer, un policía de civil caminaba por Av. Hto. Yrigoyen, cuando observa a un joven caminando con una herida sangrante, que iba dejando huellas hemáticas en la vereda.
Al intentar entrevistarlo, el muchacho salió corriendo, por lo cual el efectivo lo persiguió hasta que le dio alcance.
Entre las cosas que llevaba consigo, se cuenta un celular, que minutos antes había robado del interior de una camioneta Chevrolet Meriva, a la cual le había roto un vidrio para «manotear» el teléfono.