Mariano se sentía muy mal, y es por eso que decidió ir al médico.
Optó por hacerlo en el Centro de Salud Municipal del barrio El Molino, donde fue atendido por la médica clínica Verónica Pérez, quien le ordenó hacerse una ecografía abdominal.
Y en virtud que el paciente no tiene obra social, la doctora le agregó en la orden que el estudio debe hacérselo de urgencia.
Mariano, con el papel en mano, fue al Hospital Schestakow, para pedir un turno con el ecógrafo, y grande fue su sorpresa cuando le dieron fecha para el 12 de Octubre, pese al pedido «urgente».
«El dolor no me deja dormir, ni comer, ni trabajar… sólo quiero saber a que se debe», nos dijo Mariano, estupefacto por la fecha del turno.
Este no es un problema originado por la actual administración del hospital, sino que lleva años, debido al colapso del sistema público de salud, que la política no puede o no quiere solucionar.