Reconocidos méritos tuvo en San Rafael un oficial de singulares y probadas condiciones militares, quien al finalizar la década de 1850 fue designado comandante del Fuerte en cuyas cercanías nació al comenzar el año 1820. Hombre virtuoso y opuesto al dogma católico, pero ferviente al razonamiento puro de Moreno, Belgrano, el Almirante Brown y tantos otros, cumplió funciones hasta finales de 1860, pues se integró a las luchas por la organización nacional llevadas a cabo en Córdoba, Mendoza, y San Juan, ciudad ésta en donde, sin pruebas, fue acusado del fusilamiento de Aberastain, a raíz de lo cual fue encarcelado. Manuel Olascoaga, íntimo amigo del preso, recibió la visita de la anciana madre del militar detenido, a fin de que su hijo
Históricas
Históricas: Estela de Cuervo*
El gran escritor, el notable poeta, el genio de la filosofía, el eminente físico y químico o las grandes celebridades, suelen ser tan modestos como humildes. La condición de humildad es patrimonio de los grandes de espíritu. La antítesis más cabal de la soberbia y arrogancia estaba encarnada en aquella mujer pura bondad que consagró su vida al aula, y desde ella pareció mirar afable el transcurrir del mundo de la enseñanza. Era la maestra, que reflejando la existencia pacífica y sin alardes de una sociedad como la sanrafaelina, parecía fundida en el molde de la población. Estela de Cuervo debe haber ignorado la existencia del vocablo vanidad. Ni sus alumnos ni la gran familia local la vieron ocupar la primera fila en
Históricas: El abuelo de la Niña Encantada
Absortos, miraban los familiares de Piuquén la gigantesca piedra ubicada en la cumbre del cerro que le sirve de pedestal, a cuya vera una culebreante corriente desembocaba en el río. Un temblor de tierra había alterado el orden y la disposición hasta entonces contemplada, y ahora, en la ribera, una roca formaba casi la figura viva de un pastor que cuidaba sus cabras. Reconocieron en él, al abuelo de la Niña Encantada, de la vecina laguna del mismo nombre, donde una increíble formación pétrea dibuja a la perfección, la silueta de una jovencita que inmóvil permanece con la vista fija en el cielo. Era durante la hora del crepúsculo, cuando los rayos del sol del ocaso matizaban los abruptos peñascos y laderas en
Históricas: El valiente Comandante Saturnino Torres*
Cuando aún no había cumplido doce años y comenzaba a ser adolescente, en los comienzos de 1861, víctimas del terremoto que destruyó a Mendoza, murieron los padres y tres de los cuatro hermanos de Saturnino Torres. Alejo, su admirado hermano mayor, el otro sobreviviente, ya andaba por el sur de la provincia a los lanzazos con la indiada de las fronteras, y sus hazañas causaban entusiasmo en el niño, que vivía en la casa de su tío materno don Lisandro Moyano. Rebelde e independiente era el muchacho, quién antes de cumplir 15 años se enroló como voluntario en un escuadrón de guías, donde llegó a ser jefe antes de cumplir su mayoría de edad. Preciso es hacer un estudio detenido de la campaña
Históricas: Enrique Tenconi, el hombre orquesta*
En la mensajería de Poggi, se mencionaba a uno de los jóvenes más viajeros que llegaron a San Rafael, pese a contar con unos 30 años. Su aspecto, típicamente italiano, la simpatía que irradiaba por los cuatro costados, y la verba (aquella verba que era imposible comprender) causaba la hilaridad del contado número poblador de la colonia francesa. Su habla era distinta a la de sus connacionales inmigrantes llegados poco antes al sur mendocino. Era un dialecto que, según el muy culto Arturo Blanco, quién hizo varios viajes a Europa y conocía gran parte de las provincias del "país del Dante", era común en aldeas, por más próximas que estuvieran entre sí. "El dialecto -afirmaba don Arturo- no es más que
Históricas: La historia del visionario Ignacio Sueta*
Muchas décadas atrás, cuando despertaba el presente siglo, y era ya inminente la tan ansiada llegada del tren a San Rafael, solía recorrer los escasos comercios existentes en la Colonia Francesa, un hombre joven, bien trajeado, con lentes -aquellos clásicos sujetos a la nariz- y cuidadosamente peinado cabello negro. Simpático y conversador, era miembro de una acreditada casa comercial de Buenos Aires, a la que representaba como vendedor viajero en las provincias de cuyo. Tal vez fue su visión de futuro, fácil de advertir en un San Rafael que se desarrollaba a ojos vista, lo que determinó su rechazo a la propuesta que le hicieron sus socios porteños. - ¿Te gustaría ser designado comprador oficial de nuestra casa en Europa? - Por supuesto
Históricas: El Almacén de Daniel Julian*
Innumerables son las personas, que desde distintas posiciones han contribuido tanto al desarrollo como a la convivencia del pueblo sanrafaelino. Incorporamos en esta caravana de pioneros, la figura de Daniel Julián, nacido en una aldea de la provincia española de Teruel, quién junto a su hermano Gregorio llegó a Mendoza, accediendo al llamado de don Miguel Escorihuela Gascón residente en la capital cuyana. A poco de su arribo a dicha ciudad, Daniel, en una diligencia se dirigió a San Rafael, donde un tío suyo poseía un gran almacén de ramos generales, en tanto que Gregorio se quedó en Mendoza para integrar el establecimiento vitivinícola Escorihuela, propiedad del arriba citado. Meses después de su llegada a la ex "Colonia francesa", y habiéndose desvinculado su
Históricas: La batalla del Capitán Montoya contra los indios*
Aquel largo centenar de hombres que permanecía en el interior del fortín, casi al tiempo que el clarín lanzaba su voz aguda y penetrante, a toda carrera, atropellándose entre sí, buscaba sus armas a fin de resistir y contrarrestar el ataque. La claridad del alba permitía ver el campo blanco de escarcha, y junto a una fogata, el guardia a duras penas lograba mantener parado el fusil de chispa cuyo caño parecía de hielo, y fue entonces cuando tras la clarinada, a todo lo que le permitía la voz, gritó repetidas veces: "¡Los indios, los indios están encima nuestro!!! El vocerío salvaje era infernal, y dentro de la fortaleza, mientras los soldados buscaban posiciones, las mujeres se prestaban a la lucha mientras
Históricas: La muchacha convertida en piedra*
En la zona donde hoy existe la Villa "El Sosneado", a unas treinta leguas hacia el oeste del gran territorio del aún no fundado San Rafael del Diamante, vivía con su madre una muchacha india, desobediente y de mal carácter, llamada Elcha Yancatú. Cierto día, su madre, una araucana tan bondadosa, como rebelde era su hija, le pidió que trajera agua de la vecina "Laguna Querida", cosa que disgustó a la joven, quién, a regañadientes, y con un cántaro en la cabeza, marchó hasta las cristalinas aguas, donde vió nítidamente reflejado su rostro, que a pesar de ser hermoso, ella lo juzgó de horrible. Maldijo su suerte, y presa de furia arrojó con violencia el recipiente sobre las piedras del lago. Tomó asiento,
PEDIDO DE DISCULPAS A NUESTROS LECTORES
A nuestros cientos de lectores diarios incondicionales, como a aquellos que nos visitan en forma esporádica o en situaciones excepcionales, les solicitamos disculpas, porque desde el martes no renovamos el sitio. A partir de hoy domingo volvemos a subir noticias del Sur Mendocino, contándote la realidad de una manera distinta. Gracias por la comprensión y paciencia.