Ayer en la mañana, el inspector de Estacionamiento Controlado Omar Maza, le estaba haciendo una multa a un comerciante de calle Corrientes, dueño de un negocio de computación, en virtud a que había estacionado el auto en la vereda.
El comerciante salió del local, se abalanzó contra el inspector, lo agredió y le sustrajo dos talonarios, que los llevó hasta el interior del comercio.
Maza hizo la denuncia en la Comisaría 32, donde se intenta establecer la identidad del comerciante, quien ahora enfrenta un proceso por hurto y agresión.
No es la primera agresión que sufre Maza, como así también sus compañeros, en el cumplimiento de su trabajo, y es preciso una resolución judicial ejemplar para evitar este tipo de conductas por parte de los infractores, que además de burlar la ordenanza en vigencia se hacen los «locos» ante estos empleados públicos.