Tienen 14 y 15 años, por lo cual no podemos mostrar sus caras.
Se trata de una parejita de novios que sale a robar casi todos los días, generalmente con la modalidad de arrebato.
Entran juntos a negocios, y mientras uno distrae al comerciante, el otro agarra cualquier cosa de valor del mostrador y sale corriendo.
Así robaron el sábado el teléfono de una cajera del Átomo, y el lunes ingresaron a la heladería El Pinito y se llevaron una bicicleta, un celular y una mochila del hermano de la encargada.
En varios barrios ya los conocen, y los echan de los negocios ni bien los ven entrar.
Un sinfin de veces fueron detenidos y trasladados a la Comisaría del Menor, pero a los pocos minutos ya recuperan la libertad, y vuelven a sus casas de barrio El Molino.
Los jueces se abstienen de mandarlos al ex COSE de Mendoza, poniendo así en peligro no solo a los ciudadanos comunes, sino a ellos mismos, que en cualquier momento van a ser blanco de una paliza por parte de una futura víctima.
ALLANAMIENTO Y DETENCIÓN
Un día después del robo a la heladería, personal de la Unidad Investigativa allanó el domicilio de estos precoces malvivientes, y obviamente no encontraron la bicicleta ni los otros bienes.
Lo positivo fue que se detuvo a ambos en las inmediaciones del barrio, y ahora quedaron a disposición de la fiscal Becerra.