En el camino carretero de San Rafael a Rama Caída, existe un paraje que se llama Pobre Diablo, y el origen de su nombre (según lo contaba un viejo criollo del sur llamado don Justo Rojas), provenía de don Manuel López, al que llamaban «el Pobre Diablo».
Don Justo Rojas y don Manuel López, alias el Pobre Diablo, habían servido como soldados a las órdenes del comandante Saturnino Torres, en el escuadrón llamado Los Choiqueros, y al terminar la campaña contra los indios, se dedicaron a las actividades de puesteros en la crianza de haciendas.
Don Justo Rojas se estableció en el paraje llamado la Laguna de la Niña Encantada, en Malargue, con una majada de cabras y algunas vacas, mientras que don Manuel López lo hizo a orillas del río Diamante, donde en su vejez solía contar muchas leyendas relacionadas con el Sur mendocino, por lo que pasó a conocerse el paraje con el nombre de El Pobre Diablo, en recordación de este servidor del desierto
*Publicado en el suplemento «Historias, personajes y leyendas de San Rafael» de SEMANARIO DEPARTAMENTAL