Primero denunció una golpiza por parte de su marido, tanto en Tribunales como en la prensa; luego dijo ante las cámaras de CTC que había mentido. Y 75 días después, más concretamente en la jornada de ayer, vuelve a reafirmar su primera denuncia, esta vez por la red social Facebook.
Helena Marcela Montero se presentó ante el juzgado correccional el viernes 10 de mayo para denunciar que su marido, el diputado Raúl Guerra (PJ) le había dado una paliza esa madrugada, luego que el legislador llegara alcoholizado a su casa a las 5 de la mañana, y que ella le recriminara por tal actitud.
Como Marcela desconfiaba de la Justicia, llamó a algunos medios de comunicación para pedirles que la acompañen a hacer la exposición, y que la acompañaran también a volver su casa, de calle Las Heras y Barcala, porque temía una nueva arremetida de su ahora ex concubino.
Por este tema, Guerra tuvo que pedir una licencia en la Cámara, no dio declaraciones de ningún tipo a los medios y, entre los suyos, se victimizó diciendo que Marcela «está loca», y que la denuncia que le hizo fue un invento porque ella estaba celosa, ya que él volvía muy tarde.
Todavía se recuerda el testimonio de la mujer, totalmente «empastillada», diciendo que había mentido, porque el dueño de Telesur, Gustavo Matar, la había presionado. Sin embargo, cuando se le preguntó ¿cuándo la apretaron?, dijo que después de hacer la denuncia… evidentemente, todo un despropósito y una contradicción en sí misma.
Durante un tiempo hizo silencio, pero ayer, ante un posteo en la página de Facebook «Mujeres golpeadas en San Rafael», de una joven que la acusaba de proteger a su ex, Montero rompió el silencio y escribió: «¿EN ALGÚN MOMENTO SE DETUVIERON A PENSAR QUE ESTOY AMENAZADA????? QUE ESTOY ENCERRADA EN CASA, QUE NO DUERMO POR LAS NOCHES, QUE ME PSICOPATEA POR TELEFONO Y LA JUSTICIA SIGUE SIN HACER NADA, ABSOLUTAMENTE NADA? PERO CLARO, NO NOS OLVIDEMOS QUE MI EX MARIDO SIGUE SIENDO DIPUTADO PROVINCIAL… Y LO SEGUIRÁ SIENDO, YA QUE LAMENTABLEMENTE JUSTICIA=PODER + DINERO».
El comentario reafirma su denuncia original, y habla de presiones y amenazas, a la vez que culpa a la Justicia por no haber hecho nada.
Mientras tanto, Guerra sigue paseándose como si nada por las calles de San Rafael, a la vez que cobra más de 25 mil pesos mensuales como legislador, dinero que sale de los impuestos de los que en este momento leen este artículo.
No hubo escraches, ni manifestaciones pidiendo justicia para Marcela, por parte de la comunidad sanrafaelina, como sí ocurriera, comprensiblemente, luego que el bailarín de tango Sergio Sosa golpeara a su ex novia Laura Girala.