Hoy a las 0:30, un taxista que circulaba por calle Edison y Pasteur fue víctima del vandalismo.
El chofer llevaba a una familia a una casa de la zona, pero tuvo que desistir del final del viaje, pues recibió un piedrazo en el parabrisas, que terminó destruido.
Es por eso que cambio de rumbo y dejó a sus pasajeros en la terminal, como hacen varios trabajadores del volante, que se resisten a ingresar a barrio Constitución, y luego fue a realizar la correspondiente denuncia policial.