Gracias a una denuncia anónima, personal de la Unidad Investigativa -y con la autorización de la propietaria- registró un domicilio en calle Ramón Freyre de la vecina Ciudad de Malargue.
En el galpón de la misma estaba guardada una Estanciera, que ocultaba en su interior un revólver calibre 32 y dos trozos de cartuchos de gelamon, de unos 20 gramos cada uno. Se trata de un explosivo muy potente, que contaba también con dos capsulas de ignición para su detonación.
Se dio conocimiento de ello al Dr. Boldrini del Juzgado Federal, y al fiscal Olmedo del Primer Juzgado de Instrucción.
Se continúa la investigación para determinar quien o quienes manipulaban estos elementos y con que intención, y por el momento no hay detenidos.