El Departamento General de Irrigación (DGI) lanzó el Observatorio del Agua de Mendoza. Se trata de un ámbito que integran, además el Gobierno de Mendoza, la Secretaría de Ambiente y Ordenamiento Territorial, la Federación de Inspecciones de Cauce, el Instituto Nacional del Agua, el Instituto de Agua y Ambiente de la Universidad de Mendoza, la Universidad Tecnológica Nacional y el Instituto de Ciencias Ambientales de la UNCuyo. Participan en carácter de colaboradores Aysam y Emesa.
“El agua es un tema transversal a todas las personas y a todas las actividades. Esto, cuando empezó a tomar cuerpo, a partir de un gran trabajo de Aníbal Manzur; luego se sumaron otros colaboradores. Entendimos que es una muy buena herramienta para que la utilice la sociedad, en la cual hay distintos componentes que, por ejemplo, ven problemáticas ambientales, lo cual genera temores en algunos casos, posiciones ideológicas tomadas. En otros, en contra de actividades que se presume utilizan grandes cantidades de agua o implican grandes riesgos de contaminación. Todos estos miedos y posiciones son respetables y atendibles. Lo que hay que encontrar es herramientas que nos permitan discernir si realmente esos miedos están fundados en razones válidas y objetivas”, aseguró Marinelli en la presentación del Observatorio.
“El Observatorio del Agua es una buena herramienta porque no será manejada solamente por un organismo público como Irrigación, sino por un conjunto de entidades que le darán certezas a los seguimiento de los indicadores; que el agua no se está contaminando, o que en la cantidad que se usa se utiliza eficientemente y no que hay algunos sectores que tienen la ventaja de tener agua y otros no puedan crecer”, sostuvo. “La ponemos a disposición de todos los ciudadanos para evitar que los conflictos se profundicen y se puedan solucionar de manera definitiva”, finalizó el superintendente.
Tras la firma del Acta de Conformación del Observatorio y de algunas palabras de quienes participaron del acto como Miguel Mathus Escorihuela (Instituto de agua y Ambiente de la Universidad de Mendoza), Alejandro Drobandi (INA), Gabriela Luque (Universidad Nacional de Cuyo), el ingeniero José Balacco (UTN Regional Mendoza), Edgardo Roby (Federación de Inspecciones de Cauce), Richard Battagion (Aysam), Gonzalo Verdaguer (6ª zona de riego del río Mendoza) y Luis Lemos (Emesa), se dio lugar a la presentación de la página de internet en la que se aloja y que se podrá consultar desde hoy:
¿Qué es el Observatorio del Agua de Mendoza?
El Observatorio del Agua es un ámbito participativo que tiene como objetivo promover el diálogo en torno al recurso hídrico, para contemplar indicadores con el estado del agua en cantidad y calidad, sus usos y las acciones del Estado en general. Desarrollará espacios de diálogo que faciliten la comunicación y las relaciones entre diferentes organismos, instituciones y la sociedad civil en torno a diferentes procesos vinculados al recurso hídrico y sus diferentes usos, para una mejor gobernanza del agua.
Lo integran también el Gobierno de Mendoza, la Secretaría de Ambiente y Ordenamiento Territorial, la Federación de Inspecciones de Cauce, el Instituto Nacional del Agua (INA), el Instituto de Agua y Ambiente (Universidad de Mendoza), la Universidad Tecnológica Nacional, (UTN); el Instituto de Ciencias Ambientales (UNCuyo). Además participan en carácter de colaboradores empresas como AySam y Emesa.
Tiene como objetivos observar a través de indicadores la condición del recurso hídrico de la provincia de Mendoza; facilitar la articulación entre organismos gubernamentales, instituciones y organizaciones civiles; generar un ámbito participativo para el seguimiento de las políticas públicas y acciones privadas; aportar ideas para el mejoramiento continuo de la gestión de los recursos hídricos; apoyar los procesos de planificación y gestión vinculados directa e indirectamente con el recurso hídrico e implementar estrategias de comunicación a la población y promover su participación.
El seguimiento de la gestión y control del recurso hídrico se realiza a través de un sistema de indicadores que responden a tres categorías, las cuales responden al modelo de indicadores Presión-Estado-Respuesta propuesto por la OCDE.