Durante la madrugada y la mañana del primero de enero, varias fueron las riñas donde tuvo que interceder la policía, debido a las borracheras en que cayeron sus participantes.
Una de ellas se registró en Barrio Arizu de Villa Atuel, a las 9:30 (prácticamente 24 horas tomando alcohol).
Un llamado a la Comisaría 26 alertó que un grupo de sujetos se estaban peleando. Hasta el lugar llegó una efectivo policial, quien resultó agredida físicamente cuando intentó mediar.
En definitiva, un joven de 21 años terminó detenido por lesiones y resistencia a la autoridad, mientras que la uniformada fue atendida en el hospital por «escoriaciones en zona auricular izquierda y cuello» (imagen ilustrativa).
OTRA RIÑA
Misma situación se dio a las 7:30 en Av. Balloffet al 1700 de nuestra Ciudad. Una pareja de policías llegó donde un hombre con la cara ensangrentada se tomaba a golpes con otro sujeto. Lejos de acatar la orden de los efectivos, el sujeto los agredió, hasta que pudo ser reducido y subido al móvil.
Ofuscado, el agresor comenzó a provocar daños en la patrulla, y cuando se lo metió en el calabozo de la Comisaría 38 también no paró de golpear y pegar patadas en el reducto.
«Resistencia a la autoridad y daño agravado» es la imputación que pesa ahora sobre este hombre mayor de edad.