Efectivos policiales detuvieron en la esquina de Patricias Mendocinas y Suipacha la marcha de un furgón marca Ford, ya que su conductor hablaba por teléfono mientras conducía.
Al exigirle los policías la documentación, Leandro Ariel Mañas (domiciliado en Pueblo Diamante) sólo entregó el carné de conducir, que para colmo era apócrifo.
Los efectivos se dieron cuenta, y corroboraron la información con el CEO. Al manifestarle ello al conductor, éste reconoció que había pagado 3.500 pesos por la licencia, a un sujeto del Gran Mendoza.
En definitiva, Mañas terminó en la Comisaría 8va., donde se le labraron actuaciones por «adulteración de documentación pública».