Hoy a las 11:15 de la mañana, el conductor de una VW Suran no tuvo mejor idea que estacionarse sobre la senda peatonal de calle Olascoaga, en la intersección con Bdo. de Irigoyen.
El hombre, de barba tupida, detuvo la marcha del vehículo y prendió un cigarrillo, mientras esperaba que vuelva su mujer de comprar en un negocio de la cuadra.
La gente debió saltar la acequia para poder cruzar, ya que la bajada para discapacitados estaba totalmente bloqueada por el auto.
Para peor llegó un colectivo de Iselín, cuyo chofer tuvo que hacer una proeza para doblar sin chocar la Suran, ante la imperturbabilidad del conductor.
La patente de este vehículo es NEV 462, y nos llamó la atención que las casi 30 personas que en esos 7 minutos debieron hacer todo un caminito especial para cruzar la calle, nadie le haya reprochado la acción al conductor.