Domingo al mediodía, vereda de la Parroquia San Antonio. Así estacionan los fieles que llegan tarde a la misa. En la vereda y bloqueando por completo el paso peatonal, tanto de otros fieles que van a la ceremonia religiosa como de las personas que pasan por allí. Y ni hablar de los discapacitados que se desplazan en sus sillas de ruedas.
Violación a la ley de tránsito y una tremenda falta de respeto al prójimo, todo lo contrario a lo que Jesús predicaba. Se nota que esta gente -pese a decirse cristiana- no logró entender el mensaje de su líder espiritual.