El cura párroco de la Iglesia Jesús Nazareno denunció que tras ausentarse unos minutos del templo en la siesta, desconocidos abrieron el sagrario y del interior sustrajeron un caliz de bronce con las hostias.
Fue el mismo sacerdote, Mario Alfredo Camozzi, quien hizo la denuncia en Comisaría 42º de Salto de las Rosas, localidad donde se encuentra el templo, en calle Schestakow 376.
Vale decir que para abrir el sagrario hubo que violentar un candado.