La madre de Sebastian Bordon, Miriam Medina, volvió a San Rafael junto a un grupo de personas con el fin de homenajear a su hijo, frente al monolito que se construyó a la altura del cañadón donde apareció su cuerpo, en El Nihuil.
Como lo hace todos los años, los 12 de octubre, llegó en un micro, y con gente que ni siquiera conoció al estudiante.
Hasta ahí todo bien (aunque habría que averiguar de donde sale el dinero para la contratación del colectivo), sólo que al retirarse de la Ciudad los tripulantes del colectivo se bajaron en distintos puntos de la Ciudad para escribir en las paredes leyendas contra la policía.
Vale decir que esta acción que siempre llevan a cabo constituye un delito contra la propiedad, del cual siempre salen impunes.
JUSTICIA
Lo que no pueden pedir los familiares del chico de 18 años que apareció sin vida, allá por el año 1997, es Justicia, pues la misma falló en coincidencia con lo que pidieron sus abogados querellantes.
Por tanto no hay reclamos, sólo la necesidad de insultar a toda una institución y sus hombres, muchos de los cuales arriesgan su vida todos los días para cuidar la integridad física y el patrimonio de los sanrafaelinos.