POR ALEJANDRO DELL ORBO (Director de Mendosur Medios) – Un rebelde joven de 22 años terminó en la sala de terapia intensiva del Htal. Schestakow tras recibir varios golpes en el contexto de una pelea, donde tuvo que participar la policía para separar.
El hecho tomó trascendencia pública (ver: Graves incidentes anoche…) puesto que se desarrolló en una de las carpas de la Fiesta Nacional de la Ganadería de Zonas Aridas.
Los policías que estaban apostados en el lugar debieron intervenir para que los peleadores no se maten entre ellos, incluso el sub comisario de 14º llegó inconsciente al hospital Enfermeros Argentinos producto de los golpes que recibió en la cabeza, y con fracturas.
Nos llamó la atención que un grupo denominado «Campaña Nacional Contra la Violencia Institucional Mendoza», diera a conocer el siguiente comunicado, con las fotos de uno de los detenidos:
ASI CUENTAN LA HISTORIA LOS «DEFENSORES» DEL DETENIDO
«El viernes 8 de mayo, mientras celebrábamos en el Congreso de la Nación el Día de Lucha Contra la Violencia Institucional y pedíamos «Ni Un Pibe Menos», la Fiesta de la Ganadería de Mendoza era escenario de represión y persecución contra jóvenes a cargo de la Comisaría N°14 de General Alvear, bajo el mando del comisario general Daniel Calipo y del responsable de Cuerpos Especiales Pedro Constanzo. Tal como denunciamos en su momento, el joven de 22 años Esteban Báez fue golpeado a mansalva, detenido, reprimido en el destacamento y posteriormente derivado a dos hospitales diferentes de manera consecutiva debido a la gravedad de los golpes recibidos. Otros diez chicos más también sufrieron detenciones arbitrarias la misma noche, entre ellos dos menores de 18 años.
Esteban logró mejorar el cuadro de salud con que ingresó al hospital Schestakow la mañana del 9 de mayo, y fue dado de alta días después. Sin embargo, las amenazas contra él y su pareja de parte de los efectivos de esa seccional se mantienen a la orden del día. De la misma manera persisten en él las secuelas psicológicas resultantes de la golpiza que recibió y de las condiciones con que la policía de General Alvear instó a que se mantuviera su internación: fue ESPOSADO DE PIES Y MANOS A LA CAMA del nosocomio y CUSTODIADO POR EFECTIVOS POLICIALES DE MANERA PERMANENTE. A partir de la intervención de la Campaña Nacional Contra la Violencia Institucional Mendoza, que tras recibir la denuncia se presentó en el hospital junto a una abogada, se logró que se quitaran las esposas y que el hecho fuera denunciado ante la Fiscalía de General Alvear con la presentación de pruebas a su favor…
Informamos que estamos alerta y hasta que no haya Justicia por cada uno de nuestros pibes no paramos.
(Las fotos fueron tomadas mientras Esteban estaba detenido en el Schestakow).»
LA SEGUNDA CAMPANA
Lo que no dice el comunicado es que este joven Esteban estaba totalmente alcoholizado, que comenzó la riña, y que cuando el personal policial se acercó a él para calmarlo, éste les pegó, a tal punto que lesionó al subcomisario Sergio Agostini y a otros uniformados, que -lógicamente- tuvieron que luchar cuerpo a cuerpo contra él y los otros revoltosos.
En cuanto a que fue esposado a la cama del hospital, no fue una decisión caprichosa de los policías que lo custodiaban, sino que se ajustaron al reglamento.