A las 10:30 de la mañana de ayer, cuatro delincuentes, oriundos del Gran Mendoza, ingresaron al local de Adamo Video; uno de ellos preguntó por unas pilas, otro por un bolso, y un tercero por el horario de cierre. Al mismo tiempo, el cuarto de los sujetos tomó una cámara Nikon profesional e intentó llevársela.
Uno de los empleados que se encontraba en el sótano observando las cámaras de seguridad que se ubican en el interior del comercio, notó algo raro y observó el preciso momento en que el sujeto de 48 años tomó el aparato e intentó disimularlo entre sus ropas.
El trabajador subió rápidamente las escaleras y logró alcanzar al ladrón en el mismo momento en que cruzaba la puerta. Tras un breve forcejeo recuperó la cámara, y acto seguido el hombre salió corriendo.
Néstor Adamo fue en persecución del malviviente, al que dio alcance junto a otros comerciantes que lo acompañaron en el objetivo frente a un local koreano, sobre calle Pellegrini.
Tras caer al suelo, el ladrón recibió un fin de patadas y golpes, y fue retenido hasta la llegada de unos bicipolicías.
Una vez en la Comisaría 32 se logró determinar que el sujeto tiene sendos antecedentes y es oriundo del departamento de Maipú, al parecer igual que sus cómplices, quienes no fueron aprehendidos.