Calle Las Heras al 200, frente al Palacio de Tribunales.
Sorprendimos a una mujer estacionando su auto en la vereda; se bajó con un chico y caminó hacia el Banco Nación que se encuentra en la misma cuadra.
Al retornar, después de una hora, se le consultó el por que dejó el auto en ese sitio, donde aparcar está prohibido, y contestó lo siguiente: «Es que tengo que alzar al nene, y es muy pesado… no voy a caminar tantas cuadras con él a cuestas».
Subió a su coche y se fue con la satisfacción de haber cumplido su trámite haciendo «trampa», como están acostumbrados buena parte de los argentinos.