A las 16 horas, un joven de 21 años que se encontraba trabajando en la antena de Movistar ubicada en un predio de calle Las Vírgenes al 600, cayó al vacío desde 30 metros de altura.
Gabriel Sisterna, oriundo de Tunuyán, fue asistido por personal del SEC, pero a su arribo ya su estado era irreversible, y habría muerto camino al hospital.