En un contenedor de la Plaza San Martín encontramos todos estos ejemplares.
Los tiró la misma gente que el viernes los retiró gratis de los distintos stands ubicados en el lugar, ya que se desarrolló una nueva edición de la Feria del Libro.
Lejos de devolverlos -si no los querían- o regalarlos a algún vecino o pariente, optaron por la opción de arrojarlos a la basura.
Una imagen que duele, y que muestra que lugar ocupa la cultura y la educación para muchos sanrafaelinos.