En San Rafael, como en todos lados, hay personas muy desconfiadas, por lo cual no les abrieron la puerta a los censistas*, y en algunos casos les refirieron verbalmente que no iban a aportar ningún dato.
Pero también hubo gente que fue más allá, pues dejó un mensaje escrito en la puerta.
En la fotografía adjunta, vemos la nota que encontraron los censistas en una casa del Pasaje Bufano al 100.