La pulpera de San Rafael sigue moliendo frutas, día y noche.
Hoy le toca al durazno, y así los agricultores obtendrán una mayor rentabilidad de lo que producen.
En total, durante esta jornada se están moliendo 130.000 kilos de duraznos, algunos impecables, y otros golpeados, o con pequeños defectos. Sin embargo, no perderán valor con el paso del tiempo, ya que serán transformados en pasta.
Serán las cooperativas las que ahora tendrán la misión de comercializar la pulpa, pero «sin apuro».