Eran las 5:40 de la mañana de ayer, cuando en calle Barcala al 2700 una camioneta Chevrolet C10 comenzó a prenderse fuego.
El propietario del vehículo, un hombre de 63 años, dio aviso a los bomberos, quienes combatieron las llamas, las cuales no solo afectaron a la chata, sino también un árbol y un taller de reparación de lavarropas, ubicado en le lugar.
En este caso nada tuvieron que ver los piromaníacos, sino que el origen del fuego se debió a un problema eléctrico en la unidad.
Insistimos en la necesidad que tomen consciencia los conductores, y tengan su matafuego reglamentario, para que este tipo de siniestros no se repitan.