Esta mañana la Primera Cámara del Crimen condenó al indigente Armando Capuozzo (26) a la pena de 16 años de prisión por haber abusado sexualmente de dos jóvenes en el Parque Hto. Yrigoyen.

El primero de los casos no trascendió mediáticamente, pero ocurrió a fines de enero del año pasado, e involucró a una chica de unos 20 años, a quien le eyaculó sobre su humanidad tras privarla ilegalmente de la libertad y manosearla en uno de los baños del anfiteatro.
El segundo episodio tuvo lugar el 5 de febrero del 2016, cuando una joven de 19 años fue interceptada también por este sujeto, quien bajo amenaza con un arma de fuego, la llevó a unos matorrales y la violó vaginalmente.
La chica estaba haciendo aerobismo en esos momentos de la tarde/noche, cuando el maleante la interceptó a metros del Tenis Club, aunque después se supo que el arma (la cual fue secuestrada) era de juguete.

Esta semana ambas víctimas iban a tener que revivir lo sucedido en un juicio oral y público, pero se evitaron ese momento gracias al trabajo del fiscal, sus abogados y el del violador, que acordaron un juicio abreviado, donde el acusado reconoció su crimen para recibir una pena ligeramente menor.
Fue así que los jueces Julio Bittar, Rodolfo Luque y Ariel Hernández decidieron darle 16 años de cárcel a Capuozzo, que al momento de los abusos vivía en el parque Hto. Yrigoyen.

COROLARIO
Vale decir que en 10 años más Capuozzo accederá a los beneficios de la libertad condicional, con apenas 36 años, aún en plenitud sexual, por lo cual habrá que ver que medidas tomará el estado para su regeneramiento y su inserción en la sociedad.
Quizás a algunos les parezca exigua la pena, pero es una de las máximas que prevé el actual Código Penal argentino.

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