Noelia ha sido víctima de un acosador sexual, y al no encontrar respuestas en la justicia (inexplicable inacción de la jueza Paula Arana), habló por la radio del Estado.
En diálogo con LV4, Noelia señaló que fue atacada por un joven que habitualmente se encuentra en la esquina de Sarmiento y 9 de Julio limpiando vidrios y que ya anteriormente la había agredido verbalmente.
De acuerdo al relato, el ataque se produjo el pasado 29 de enero. “Ese día, alrededor de las 19:30 caminaba sola hacia mi casa, mientras mi marido estaba en el centro con mi hijo. Venía por Quiroga y, frente a la escuela San Martín, vi a esta persona que en otras oportunidades me había acosado, pero verbalmente, entonces decidí cambiar de vereda. En esta oportunidad estaba en una moto, y simulaba tocar timbre frente a una casa. De pronto arrancó la moto y se abalanzó sobre mí, me tocó la cola y me tironeó la cartera, forcejee con él, lo que le hizo perder el equilibrio y decidió seguir. Me quedé helada, no había a quien pedirle auxilio… Pasado un tiempo pensé que se había ido y decidí seguir, pero media cuadra mas allá, al llegar al campito que está cerca de la iglesia, me había esperado escondido y nuevamente empezó a perseguirme... Recurrí a un joven que corría por la zona, me paré frente a él, porque por los auriculares no me escuchaba; él me acompañó unas cuadras y pensando que todo había terminado seguí la última cuadra y media sola, pero el agresor volvió a aparecer… Alcancé a entrar en mi casa, pero me gritaba desde afuera, amenazándome con que ahora sabía donde vivía… Llamé a mi marido y decidimos salir a buscarlo, pero no lo encontramos… Al regresar (25 minutos más tarde) nos encontramos con que habían forzado la puerta y nos habían robado. Hasta no tener pruebas no podemos relacionar un hecho con el otro, pero lo cierto es que se habían llevado una notebook, máquinas de tatuar, una valija y ropa interior, por lo que intuimos que el ladrón fue el mismo delincuente, pero hasta no tener huellas no podemos demostrarlo para poder acusarlo”.
La mujer continuó diciendo ante el aire de la emisora de Av. Hto. Yrigoyen: “Hicimos la denuncia en la Comisaría 32º, y a la mañana siguiente me llamaron porque lo habían detenido… Lo detuvo Marcelo López, de Inteligencia Criminal, pero el problema empezó cuando me llevaron a la Brigada a reconocerlo. De allí en más me hicieron ir 4 veces a declarar, porque los jueces en Tribunales, me decían que necesitaban más detalles. La declaración siempre fue la misma. Primero declaré con el juez Ravagnani y el 2 de febrero, cuando se terminó la feria, la causa pasó al juzgado de la Dra. Arana. Me llamó la atención que me citaran a declarar por teléfono, creo que correspondía que lo hicieran por escrito, pero fui igual. Supe que la familia había presentado un papel certificando que este hombre es insano. No me explico entonces porqué tiene carnet de conducir, lo han visto manejando autos, o bien por qué no está internado. Sé que le volvieron a hacer la pericia psicológica, pero entiende la gravedad de los hechos. No sé por qué entonces el juez lo deja en libertad”.
El relato, que estremecía la piel, continuó de esta manera: “Cuando pasó al juzgado a cargo de una mujer pensé que entendería como me siento. Ahora no estoy bien, siento todo el tiempo que me están siguiendo; pensé que la jueza se pondría de mi lado, pero no fue así y pasada una semana lo dejaron libre. Por la rabia que sentí fue que conté quien es la persona que me atacó y aparecieron mujeres a las que les ha pasado lo mismo. Me propuse sacarle una foto y sus familiares me la pasaron. Me quisieron ayudar, y me dijeron que lo hiciera público, porque roba hace mucho, ha atacado a varias mujeres, pero así y todo está libre… Ahora me siento más tranquila porque tengo el apoyo de la gente, no ha ocurrido lo mismo ni con los jueves ni con las leyes”.
Finalmente Noelia señaló que “quiero advertir que en estos últimos días hay gente que lo ha visto limpiando vidrios en la esquina de Alem y Mitre”.

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