¡ESCANDALOSA ACTITUD DE ESTA DOCENTE!: Fue denunciada por burlarse del apellido y la condición sexual de un alumno


Una docente fue protagonista de un episodio de bullying, en perjuicio de un alumno de la escuela Federico Leloir, donde es profesora.
La mujer, quien hace unos pocos meses comenzó a dedicarse al periodismo gráfico, primero a través de su propia cuenta de Facebook (que lleva su nombre), y luego en un precario portal digital unipersonal (más bien cuasi un diario autobiográfico), dio inicio al emprendimiento descalificando a decenas de “colegas” sanrafaelinos, por no estar de acuerdo con el tipo de editorial que manejan en sus respectivos medios, práctica denominada “periodismo de periodistas”, que suelen imitar programas de la talla de “6, 7, 8”.
Para Bibiana Deolinda Toledo TODOS SON CURRUPTOS, COMPRADOS y LADRONES, excepto ella, una suerte de mesías en el arte de comunicar.
En su clara labor de injuriar, Toledo (de 39 años de edad), volcó datos falsos sobre varios trabajadores de prensa, por lo cual uno de ellos en particular dio instrucciones para iniciar una causa penal por injurias, y otra civil por daños y perjuicios.
Vale decir que no es el primer juicio que tiene Toledo en su contra; ya varios funcionarios, empresarios y particulares pasaron por Tribunales exigiendo justicia ante sus permanentes difamaciones, con las que fantasea ser famosa. Entre ellos se cuentan al fallecido Oscar Russo, a quien se cansó de insultarlo y de tratarlo de mafioso en su Facebook; pero cuando se sentó en el banquillo de los acusados estableció la estrategia de decir «me hackearon la cuenta», negando así todo lo que había posteado durante semanas.
Como decíamos, uno de los periodistas que accionó judicialmente contra Toledo, hasta el año pasado tenía dos hijos estudiando en la escuela Federico Leloir del distrito Las Paredes; y al anoticiarse la docente que el padre le iba a iniciar una acción penal, la mujer no tuvo mejor idea que publicar en su muro personal de Facebook, en el que tiene decenas de alumnos de esa escuela como contactos, decir que el hijo menor del colega, de entonces 13 años de edad, era homosexual, y hasta le recomienda a su madre “aceptarlo” como es.
De esta manera, Toledo arengó directa o indirectamente a otros alumnos (que tiene entre sus contactos de Facebook) a burlarse de la presunta condición sexual del hijo del periodista.
La docente fue denunciada por el matrimonio ante la ministra María Inés Völlmer, a quien se le entregaron los posteos de los que hacemos mención, como así también otras publicaciones que demuestran que esta mujer no está en sus cabales.
   Pero ahí no quedó el embate de Toledo contra la criatura, pues en su muro de la red social modificó el apellido del periodista en una consonante, para que el mismo se transforme en una palabra que pretende ser peyorativa, haciendo pie en lo escatológico.
Vale decir que, por lógica, los niños tienen el mismo apellido que su padre, por lo que en la escuela se cansaron de cargar a los chicos de esa manera, citando “a la profe” como artífice de la gracia en su Face.
Se hicieron los reclamos a la directora del establecimiento, María Ines Farés, situación que obra en las actas escolares, sin embargo a la docente nunca se la sancionó, por el contrario, la pareja debió cambiar a su hijo de escuela producto de las bromas y las golpizas posteriores que le propinaban alumnos de su clase, hecho que también fue denunciado oportunamente, y que consta de manera documentada.
Esta situación derivó en que el niño entrara en una profunda depresión, al punto -primero- de no querer asistir a la escuela, y al mismo tiempo de cortarse con un elemento filoso en piernas y brazos.
Actualmente el menor se encuentra bajo tratamiento psicológico, con profesionales de la Coordinación de Niñez y  Adolescencia, donde figura en la historia clínica el suplicio que vivió el alumno que, para colmo, es insulino-dependiente desde los 8 años.
Los padres del chico explicaron que hacen pública esta denuncia ahora (marzo del 2015) porque comenzó el ciclo lectivo y Toledo sigue dando clases; no fue sancionada aún, porque -al parecer- la causa duerme en algún cajón de la DGE.

CAMPAÑA EN CONTRA
Toledo asegura no ser profesora de estos chicos, sin embargo, como forma parte del cuerpo de docentes de la entidad, lo es en forma indirecta; aunque también directamente debió serlo, pues el año pasado -ante el faltazo de la profesora de comunicación- Toledo debió tomarle examen a uno de los hijos del periodista, situación a la que éste se opuso, por lo que terminó haciéndole la prueba la regente.
Como dijimos, la causa está en manos de la Dirección General de Escuelas, que aún tiene muchos “vacíos legales” en cuanto a la utilización por parte de docentes de las nuevas redes sociales.
De hecho esta profesora tuvo cuatro denuncias anteriores en la DGE de las que resultó «absuelta» por la Junta de Disciplina, la cual alegó: «Las denuncias interpuestas relatarían  sucesos que no infringen los deberes establecidos en el estatuto docente, porque se refieren a la esfera privada, cuya resolución no corresponde al ámbito de incumbencia de este órgano disciplinario».
   La votación fue dividida por los miembros de la Junta, en un tema separado por una delgada línea, pues los docentes son referencia para sus alumnos, que debieron leer de la pluma de esta profesora, entre otras cosas, como hace alusión a la anatomía del miembro viril del intendente, o con quien se acuesta el periodista tal o cual.

DELITO TRAS DELITO
   La información de la que damos cuenta la hizo pública Diario Uno y Los Andes, entre otros medios como el mismo Canal América de Buenos Aires, donde se preservó la identidad del menor; sin embargo, la docente en su afán de defenderse y jurar y perjurar que se trata de una campaña en su contra, hace referencia a la identidad del menor, hecho que ameritó la presentación de una nueva denuncia en su contra en el Juzgado de Familia.
Recordemos que el artículo 22 de la Ley Nacional N°26.061 es muy claro respecto a las obligaciones de los medios de comunicación en cuanto a la preservación de los nombres de los menores de edad… «Se prohíbe exponer, difundir o divulgar datos, informaciones o imágenes que permitan identificar, directa o indirectamente a los sujetos de esta ley, a través de cualquier medio de comunicación o publicación en contra de su voluntad y la de sus padres».
Pero, evidentemente, pretender que esta mujer cumpla con la ley no es tarea fácil. A tal punto que el año pasado violó una medida cautelar expedida por el Juzgado Federal, según consta en el expediente 4316/13, donde se le ordenó abstenerse hablar de la vida privada de un funcionario público, causa por la que sería procesada en días más.
Por último, preguntamos a la ministra Völlmer, ¿puede esta mujer estar al frente de un aula?

La docente Bibiana Toledo
La docente Bibiana Toledo

 

Comentarios

comentarios

Top