En muchas acequias puede encontrarse el destino final de lo que sobra en las casas, o de lo que se pueda hallarse casualmente en las veredas. Si un grupo de hojas de árboles se amontona en la calle, uno de los trámites acostumbrados es barrerlas hacia la cuneta.
Si un perro con hambre quita bolsas de los canastos, los residuos pueden terminar disimuladamente (pie que empuja mediante) en una hijuela. Cosas similares ocurren con animales muertos, pañales, botellas, envoltorios de cigarrillos, etcétera.
GENTE MUGRIENTA
Las acequias sanrafaelinas muestran un variopinto paisaje que, en muchas zonas, dejan mucho que desear, producto de las malas costumbres de la gente.
Para dejarlas en óptimas condiciones, y rezar luego que los vecinos las mantengan limpitas, comenzó un intenso operativo de limpieza y acondicionamiento.
Y como los obreros municipales se hacen insuficientes, el Ejecutivo decidió asignar los trabajos a una empresa privada que contrata y forma sus propias cuadrillas.
Actualmente trabaja en barrio Municipal, donde la comuna colabora con las bolsas de consorcio y los camiones que llevan lo recolectado hasta el parque de saneamiento La Tombina.
CRONOGRAMA DE TRABAJO DE LA EMPRESA CONTRATADA
Desde la Dirección de Servicios, Carlos Arija explicó que los trabajos demorarán un tiempo largo, por la suciedad extrema de las acequias en diversos sectores. Además de la limpieza, se despejan los puentes obstruidos para que el agua escurra normalmente.
La mayor parte de la faena se realiza a punta de pala. Luego los desechos se cargan en camiones y se continúa con nuevas cunetas.
Se estima que cada operario ejecuta entre 200 y 300 metros diarios de perfilado y limpieza, por lo que cada cuadrilla, de aproximadamente 10 personas, avanza entre 2.500 y 3.000 metros por jornada de trabajo.
El cronograma del operativo especial de limpieza de acequias, dio inicio – hace pocos días – en el sector comprendido por las calles Perón, Adolfo Calle, Comodoro Pi, Chacabuco, Callao, Gutemberg y Tirasso. Continuará posteriormente en Pueblo Diamante, en la avenida Mitre y el bulevar de la rotonda de la Copa.
«El último día de trabajo será el que nos encuentre sin residuos en las acequias sanrafaelinas», anticipó Arija.
En este tipo de labores son valiosas las sugerencias de los vecinos: «Ellos son los que conocen todo y nos dicen cuales son las zonas más complicadas, donde hay tapones, o los puntos de estancamiento del agua; articulamos así el trabajo con la gente para hacerlo más efectivo”, señaló el responsable del operativo «acequias limpias».
Respecto a lo que se encuentra y sorprende, dijo que la mayoría de los elementos extraídos de las acequias son hojas y botellas, y en las zonas cerradas, como ser los puentes, animales muertos, cajones, cubiertas, electrodomésticos en desuso, de todo”.
CONSERVAR LA LIMPIEZA
Ya pensando en el día después de la limpieza, el funcionario pidió a los vecinos que colaboren con su cuidado y que no arrojen basura (en cualquiera de sus formas), para evitar desbordes de agua o pudrición de elementos.
Una vez finalizado el operativo integral, los cauces quedarán despejados, se logrará una mejor circulación de agua, y se evitará la acumulación de desperdicios en San Rafael.