El 9 de febrero del año pasado, Ricardo Gustavo Martínez (37) se defendió con su escopeta calibre 12 del ataque de un grupo de malvivientes que tienen a maltraer a los vecinos de la Isla del río Diamante.
El hecho de sangre ocurrió frente a la vivienda de Martinez, en callejón López e Iguazú, cuando Miguel Angel Lara (22) junto a otros inadaptados, intentaron agredir al hombre de 36 años, al que amenazaban con un revólver.
Martinez le disparó a Lara, a la altura del tórax, e inmediatamente corrió hasta la Comisaría 38 para buscar refugio, donde entregó a los policías su rifle.
ABSOLUCIÓN
Esta semana tuvo lugar el juicio oral, donde el fiscal de la Segunda Cámara del Crimen, Víctor Hugo Giambastiani, pidió la absolución del acusado, que fue aceptada por los jueces Raúl Rodríguez, Aroldo Gorri y Rodolfo Luque.
La imputación finalmente terminó en «homicidio en legítima defensa», sin embargo Martínez debió pasar un año en la cárcel de encausados. Además, sufrió el incendio de su camioneta y el de su casa, por lo que sus hijas tuvieron que irse a vivir a otro lugar, por el riesgo de vida que corrían por parte de amigos y familiares de Lara que le juraron venganza.
Hay que decir que la víctima, alias «el Jetón», tenía sendos antecedentes policiales por robo y agresión.