Finalmente la fiscal Andrea Rossi caratuló la causa como ¨homicidio doblemente agravado, por el vínculo y alevosía¨, situación por la cual Julieta Silva Macagno será trasladada mañana martes a primera hora a la cárcel de San Rafael.
De la investigación se desprende que la comerciante de 29 años atropelló a Genaro Fortunato con la intención de matarlo, o provocarle importantes lesiones.
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Demás está decir que el homicidio de Fortunato ganó la atención de buena parte de los medios nacionales, al punto que TN transmitió en vivo esta mañana la conferencia de prensa de la fiscal Rossi.
MAS DETALLES
A medida que pasan las horas se conocen más detalles del hecho, como por ejemplo que víctima y victimario habían tenido una relación amorosa desde hace algunas semanas, y que Silva estalló de bronca al enterarse que Fortunato había dejado embarazada a su ex novia, Agustina Quiroga, quien tiene 4 meses de gestación.
Agustina estuvo 8 años de novia con el rugbier del Club Belgrano, pero habían roto un par de meses atrás, más precisamente en el tiempo en que la joven quedó encinta. Pese a ello, Agustina le dedicó sentidas palabras en su Facebook.
¿QUE PASO EN MONA?
Una de las versiones que maneja la Justicia, en base a distintos elementos de prueba, es que esa noche la pareja se encontró en Mona Bar, y que Julieta fue anoticiada del embarazo de Agustina. Dentro del local nocturno habrían discutido y forcejeado, hasta que ella tomó la determinación de irse. Sin embargo fue seguida por Genaro, quien se tiró arriba del capot de su Fiat Idea para no dejarla ir.
Pero lejos de llamar a la policía o pedir auxilio (al sentirse amenazada o acosada), Julieta tomó la peor decisión: Arrancó el auto y generó la caída de su ¨enamorado¨ al asfalto. Pero ahí no quedó la cosa, pues presa de su ira, la mujer hizo un giro en U, aceleró y le pasó por encima a Fortunato.
MAÑANA NUEVO DOMICILIO PARA JULIETA
La mujer, de clase media y propietaria de un local de indumentaria en Av. Quiroga, primeramente fue a parar a la Comisaría 60, luego a Salud Mental del Schestakow (donde durmió anoche), y esta tarde al calabozo de la Unidad Investigativa, donde espera mañana ser trasladada al pabellón femenino del penal de Mitre y Pampa.
Julieta llegó a la dependencia policial vistiendo una calza, con el pelo atado y con los ojos hinchados, producto del llanto incesante y el mal descanso.
CONCLUSIONES
Lo cierto es que Silva dejó provisoriamente a sus dos hijos de 5 y 9 años sin mamá, y en forma permanente sin papá a una beba que está por nacer.
Sus criaturas quedarán con el papá, un joven que es dueño de una importante librería de nuestro medio, y con quien estaban los chicos al momento del homicidio. Vale decir que la pareja se había separado hacía aproximadamente un año y medio.