En dependencias de la escuela artística Selva C. De Nunciato, se celebró una inusual reunión entre el máximo responsable institucional de la Cultura del departamento, y todos los artistas locales que quisieron o pudieron asistir.

Diego Rodriguez Caligaris escuchó la inquietud de los hacedores culturales, y se comprometió a ayudarlos a que se organicen, al mismo tiempo de facilitarles elementos técnicos para el desarrollo de sus talentos, como equipos de audio, luces y escenario.
Fue un principio de conciliación, entre un organismo que por años pareció peleado con nuestros artistas.

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